Al momento de evolucionar tú marca, puedes tener dos grandes enemigos y estos son: la perfección y la procratinación. Así, cuando te dices a ti mismo que eres una persona perfeccionista y que por ello prefieres hacer las cosas paso a paso, en realidad puedes estar perdiendo el tiempo, de cierto modo, y dejando para mañana lo que podrías ejecutar hoy mismo.
Para un emprendedor, una de las peores cosas es pasar un día sin haber cumplido sus objetivos y por esto, mayormente viven bajo un modelo mixto de creación y desconexión. Ya que, desarrollar y escalar una marca personal, por ejemplo, se trata de un entrenamiento continuo para lograr ser cada vez más productivo.
Pero es preciso comprender que nadie es perfecto, por lo que si te consideras un procrastinador, es esencial que leas los tips que te presentamos a continuación para dejar de serlo y además, no debes descartar la idea de seleccionar a alguien como tu accountability partner o hasta tener un coach a tu lado.
El significado de procrastinar en un negocio
Te puedes estar preguntando qué significa procrastinar y los efectos que puede tener en tu día a día, ya que no solo es una cuestión de posponer una tarea importante sino que va mucho más allá de eso. Y bien, es dejar de tomar acción en pro de la consecución de tus metas o sueños, por el simple hecho de tener miedo a tomar una decisión inoportuna. Además, significa también dejar de vivir como te mereces.
Entonces, procrastinar es no tomar acción para ir en la dirección correcta hacia tus logros y desafortunadamente, es algo que no se puede combatir con determinación y un poco de planificación semanal.
Pero, ¿Cómo puedes dejar de procrastinar para poder alcanzar tus objetivos?
Los ingredientes principales para combatir el terrible problema de la procrastinación, es planificar e imponerte metas que de verdad te motiven.
Por su parte, otros aspectos esenciales para ello, es responderte claramente las siguientes interrogantes:
- ¿Cuáles son las consecuencias que estoy viviendo hoy en día por ser un procrastinador?
- ¿Existe algún miedo que me está frenando para lograr mis metas? ¿Cuáles son esos miedos o inseguridades?
- ¿Será que el objetivo que me he planteado, realmente va conmigo, mis preferencias y mi visión de futuro?
- ¿Qué podría suceder en el futuro si sigo procrastinando?
- ¿Qué conseguiría si dejará de posponer mis proyectos y sueños?
- ¿Estoy capacitado para cumplir esa meta? O ¿Qué debo hacer para capacitarme y sentirme más seguro?
Por medio de estas preguntas, puedes sincerarte contigo mismo y también visualizarte en el futuro para dejar a un lado el hecho de pasarte tú día a día procrastinando. Fíjate, especialmente, en cómo te gustaría que fuera tu vida personal en un futuro y a que detalles les das más valor para ello.
Tres claves para dejar de ser un procrastinador
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Primero anuncia y después ejecuta
Esto funciona sumamente bien. Por ejemplo, puedes aplicar la hora para hacer un lanzamiento, por pequeño que sea, y darlo a conocer a tu público en redes sociales con una fecha específica. Así tú mismo sabrás que no hay marcha atrás y todo funcionará en pro de su desarrollo, desde ese instante.
Por consiguiente, se trata de una forma de comprometerse y no caer en la temida procrastinación. Lo mejor es que se ha comprobado que esto, funciona en la gran mayoría de los casos y es una gran técnica para los emprendedores.
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Confía siempre en tus delegados
Si eres perfeccionista, puede que esta recomendación no te luzca muy bien pero en realidad, funciona. Ya que, una vez la ejecutes, te vas a sorprender hasta dónde puede llegar tu negocio gracias al trabajo que comiencen a desarrollar otras personas, una vez delegues funciones.
Si bien es cierto, delegar no es una tarea fácil y puede significar una batalla para dejar de procrastinar pero sin duda, es de gran ayuda, ya que entre tu vida personal, tus proyectos personales y un sinfín de cosas, puedes impedir que tu negocio evolucione. Por lo cual, tener un equipo que te ayude a transformar tu empresa positivamente, te permite minimizar al máximo las posibilidades de dejar a un lado o para otro momento, las decisiones más relevantes.
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Solicita ayuda a tiempo
Como ya te indicamos, es preciso que te coloques en manos de buenos profesionales y amigos, antes de que sea muy tarde, solo te quede lamentarte y empieces a procrastinar con el cumplimiento de los objetivos una vez planteados.
Muchas veces, pedir ayuda cuesta pero si se trata de cuidar la imagen de tu negocio o tu marca personal, es esencial que comiences a valorar tu tiempo por encima del dinero y logres pedir ayuda a las personas más indicadas que te asistan perfectamente en pro de las metas que quieres alcanzar con tu negocio.